Actualizar tu cerradura es la forma de protegerte frente a nuevos métodos de apertura. Hoy día ya no solo es importante que las cerraduras o las puertas sean resistentes a nivel estructural, también deben tener un mínimo de complejidad a nivel técnico.
Los métodos preferidos por los ladrones son aquellos que permiten abrir sin necesidad de vulnerar la cerradura físicamente, lo cual se traduce en ningún ruido y la apertura en pocos minutos. Romper, serrar, perforar o palanquear son métodos ruidosos y en ocasiones costosos que por la facilidad con la que la mayoría de las cerraduras pueden abrirse con técnicas de habilidad -ganzúas o “bumping”-, han quedado en segundo plano, aunque es cierto que aún se emplean, sobretodo si no hay vigilancia natural.
Al objeto de evitar estas técnicas y cuando el sistema de cierre instalado lo permite, sustituimos algún componente del mismo para mejorarlo a nivel técnico, consiguiendo aumentar drásticamente el tiempo necesario para entrar en nuestro domicilio. En resumidas cuentas lo que buscamos es proteger el sistema que tengas para disipar sus carencias:
- Sofisticación mecánica (Técnicas de habilidad)
- Protección física (Técnicas de rotura)
El estándar de seguridad hoy en día nos lo proporciona el sistema europerfil, dónde encontramos sistemas de cierre muy sofisticados que evitan el robo de los tres minutos -“bumping” o ganzúa-, y una protección física que lo acompañe para evitar los ataques más clásicos (físicos). La combinación de estos dos elementos es lo que entendemos como el estándar de seguridad.